Las 3 mejores películas de Jared Leto

Para no acabar etiquetado lo mejor es marcarse un Jared Leto. Hacerlo todo y moverse escurridizo entre artes escénicas y musicales acaba por conseguir que los aficionados al cine o a la música le puedan perder la pista, hasta su siguiente irrupción en el escenario más insospechado.

Pero deteniéndonos en el cine y atrapándolo precisamente en esa faceta interpretativa, descubrimos a un Jared que podría ser estéticamente una mezcla entre Brad Pitt y Joaquin Phoenix. Aunque en lo que a actuaciones se refiere acaba destilando esa autenticidad que le viene de serie.

Caracterizaciones de absoluta proximidad. Esa capacidad de lo mimético que hace padecer o disfrutar al espectador a partes iguales. Si finalmente Leto se centró en lo cinematográfico, como parece que apunta el asunto últimamente, tendremos a un candidato al Óscar como protagonista en alguna de sus pelis.

Top 3 películas recomendadas de Jared Leto

Las vidas posibles de Mr Nobody

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Vale que los argumentos con un deje de fantasía espacio temporal me tienen ganados de entrada. Pero es que lo de esta película se complementa con un argumento que se nos bifurca en una extraña disyuntiva que acaba por reconducirse hacia una existencia paralela de conciencia dual, llamémosle así… La elección y la libertad casi onírica de saber que todo se llevó a cabo. Quizás por aquello de que el tiempo pueda ser un círculo, se lo quiera denominar como reencarnación o remoto anhelo.

La vida de Nemo cambia cuando sus padres se separan. Él es tan solo un niño, pero tiene que decidir con quién de los dos, o su padre o su madre, prefiere quedarse. Según la decisión que tome, podrá vivir distintas vidas.

En el año de 2092, Nemo Nobody, que tiene 120 años, es el último ser humano mortal de la Tierra y vive rodeado de hombres que han alcanzado la inmortalidad gracias a increíbles avances científicos. Cuando Nemo se encuentra en su lecho de muerte, recuerda varias posibles existencias y matrimonios que no llegó a vivir.

Morbius

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Las películas de superhéroes tienen mucho de previsibles. Porque si no siguen los patrones del enfrentamiento entre el bien y el mal con la victoria final como moraleja (o al menos la revancha que conduzca a la victoria más pírrica) Pero Jared Leto sabe conferir al asunto, ese no sé qué de trascendencia más allá de la hipérbole. Porque antes que superhéroes, los griegos y muchos otros ya inventaron a los dioses. Y por algo sería…

El Doctor Michael Morbius (Jared Leto) es un bioquímico que sufre una extraña enfermedad en la sangre. Para curarse y dar una respuesta a su trastorno, en el proceso, se infecta sin darse cuenta con una forma de vampirismo. Aunque debería haber muerto, tras la cura, Michael se siente más vivo que nunca y adquiere dones como fuerza, velocidad, capacidad de ecolocalización, además de una necesidad irresistible de consumir sangre. Trágicamente convertido en un imperfecto antihéroe, el Doctor Morbius tendrá una última oportunidad, pero ¿a qué precio?

Réquiem por un sueño

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El extraño magnetismo de la perdición. La insondable fuerza centrípeta que puede conducir desde la juventud hacia un oscuro desencanto y la vejez. Con el deje melancólico de Jared Leto lo de interpretar a un toxicómano envuelto por esas desastrosas inercias desde la desestructuración y la asunción de la temprana derrota cobran otra dimensión. Y nadie puede evitarlo, porque al igual que Harry, su personaje, todos abandonaron el barco de la realidad hace ya tiempo. Naufragios modernos…

Harry Goldfarb es adicto a la heroína. Su vida gira en torno a su adicción, una adicción que ha acabado por aislarle del mundo exterior. Junto a su novia Marion y su mejor amigo Tyrone, también drogadictos, ha creado un paraíso artificial en el que nada es lo que parece. En busca de una vida mejor, el trío queda atrapado en una espiral de caídas, angustia y desesperación.

La madre de Harry, Sara, tiene otro tipo de adicción: la televisión. Viuda desde hace años, vive en Coney Island sin más compañía que la de su amado televisor. Sueña con participar en su concurso favorito, y para ello debe perder peso, pues no puede acudir al programa sin su preciado vestido rojo. Su nueva dieta le acaba por atrapar.

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