Aquí. Los 3 mejores libros de Soren Kierkegaard

Kierkegaard o cuando la filosofía y la literatura se unen. Porque si todos asociamos rápidamente a Sartre como el personaje nuclear de esta corriente histórica, sin duda gracias a su faceta novelística, no hay que olvidar que el asunto del existencialismo es eminentemente filosófico. Y ahí Kierkegaard tira de esa literatura esencial que es tratar de encontrar las más trascendentales respuestas. Siempre desde un planteamiento novedoso, una suerte de «existo, luego pienso».

Y claro está, de la misma forma que hace ya un tiempo me quedé a gusto con mi filósofo favorito, ese Nietzsche con su obra al compás del Wagner más oscuro, me toca ahora dar un repaso a algunos de los libros más recomendables del pensador danés.

Evidentemente, se trata de un autor denso, de esos que debes leer sin distracción alguna para no acabar sumido en la más honda desesperación por un texto que parece haber cambiado de idioma repentinamente.

Pero una vez que te dejas llevar. Cuando consigues conectar con los conceptos, con las interpretaciones, con las conjeturas y con esa especie de ciencia imposible que es la filosofía en busca del convencimiento, acabarás capturado cual Ulises bajo los arpegios de esa sirena disfrazada que es Kierkegaard.

Top 3 libros recomendados de Soren Kierkegaard

Diario de un seductor

Tratar de dar un orden de prioridades en la obra de un filósofo tan relevante como Kierkegaard tiene su enjundia. Pero esta novela puede considerarse precursora de tantos y tantos escritores empeñados en ofrecer en sus personajes esos atisbos de humanidad profunda hasta lo visceral, hasta lo psicosomático.

Y tan solo por eso, amén de su valor inherente, la destaco en primer lugar. Tras este título con apariencia de novela rosa, se esconde una potente historia sobre el hecho subjetivo del amor, de la pasión, de su capacidad para transformar la realidad.

Y claro, nada mejor para un pensador del calado de Kierkegaard que despegar con un desamor personal desde el que componer la narración. Porque todo parte de uno de esos amores ciertos y de sus heridas.

Juan y Cordelia son los amantes de esta historia. En la pasión disfrazada de amor de Juan se esconde toda la intención filosófica de la trama, mientras que Cordelia queda relegada a ese padecer casi romántico, una expresión ya abandonada por los nuevos escritores de la época.

Juan y su paso por el mundo sin mayores cuestionamientos que sus necesidades más pasionales. Juan y las pulsiones que lo mueven por sus días. Acaso la felicidad pero sin duda la ignorancia. El peso por atravesar la escena como si nada o tratando de comprender qué es lo cierto más allá del escenario de la vida.

Temor y temblor

La experiencia propia como recurrente argumento desde el que perfilar esa filosofía de la existencia. No puede ser de otra manera. El existencialismo antepone ese ser a toda intención de proyección ideal, condenada a su parecer al fracaso del desconocimiento y la hipótesis incontrastable.

Frente a Hegel y sus métodos, el atrincheramiento en el descubrimiento de la imposible noción de lo ajeno.

Así, bajo los condicionantes más particulares y ya antes pincelados en Diario de un seductor, Kierkegaard escribe desde la amarga percepción de la soledad y la voluntad de supervivencia desde el profuso intento por descubrir.

Con la vanagloria, o quizás a sabiendas del valor universal de esta obra, ¿quién sabe?, el propio autor parecía haber quedado muy satisfecho con este ensayo que parte de la imperecedera imagen de Abraham a punto de matar a su hijo.

La religión puede explicarlo, sublimarlo como quiera, pero Kierkegaard se fija en la parte homicida, en la capacidad del hombre para destruir lo que más quiere. Fe, locura, pasiones, amor, soledad.

Conceptos que desde ese instante del imaginario católico conocido por todo el mundo, te enredan maravillosamente en ese universo interior desde el que un Universo exterior puede empequeñecerse hasta lo angustioso.
Temor y temblor

El concepto de la angustia

Pues sí, estás en lo cierto. No cabe duda que de tanto plantearse ese ¿Qué hacemos aquí? en medio de la soledad más absoluta y con la vista perdida en la infinitud de una negra cúpula celeste, acaba uno por conocer bien de cerca la angustia.

El caso es que Kierkegaard se atrevió además a escribir sobre ella. Y para él resulta que la angustia es una especie de destino buscado, una tensión entre los equilibrios de la razón, la derivada de la moral, la necesidad de creer en Dios y las pulsiones que empujan como dirigidas por los demonios.

Si el ser humano es eminentemente racional, la contradicción con su instinto marca un dificil campo de batalla en el que esa angustia acaba despertando por necesidad.

Lo más fascinante de este relato estremecedor del existencialismo como la dicotomía más inquietante es, curiosamente, la parte literaria, la belleza de la exposición, la inmortalidad de conceptos e imágenes paradójicamente en torno a la angustia de vivir.

El concepto de la angustia
5/5 - (15 votos)

1 comentario en «Aquí. Los 3 mejores libros de Soren Kierkegaard»

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.