Los 3 mejores libros de James Joyce

Suele ocurrir que la heterogeneidad de la obra sea una de las virtudes de los genios. Y, sin embargo, llega un día en que terminas una de ellas, tal que Miguel Ángel exhortando ese famoso: ¡Habla!, destinado a su David y parece que todo lo anterior y lo venidero, en su variedad, potencialidad y gran valor, pierda de repente su valor.

Algo así le debió pasar al heterogéneo James Joyce cuando terminó su Ulises…, pese a que los primeras intenciones de publicación no fueron nada halagüeñas, la censura inglesa enfrentaba sus filtros éticos de la época a esta gran obra. Tuvo que ser París la ciudad que parió la obra completa allá por 1922.

Ulises a parte (pese a que sea mucho apartar), la obra de James Joyce rebosa riqueza, creatividad y humanidad en muchas de sus múltiples composiciones. De justicia es hacer una selección para que, al menos, Ulises comparta podium con otros dos buenos libros del genio irlandés…, porque si era ya mucho que la patria irlandesa tuviera a Oscar Wilde, este nuevo autor universal llegó para darle el relevo en lo que fue un esplendoroso siglo (entre el XIX y el XX) de las letras para esta tierra de castillos, de mitos y leyendas, de exuberancia frente al mar y de intrépidos isleños.

3 novelas recomendadas de James Joyce

Ulises

Las épicas narraciones clásicas despiertan, paralelamente a su intención enaltecedora, el sarcasmo de la cotidianeidad. «Los héroes clásicos han ido a pasearse en el callejón del Gato», como diría Valle-Inclán. El más acertado relato sobre la paradoja de vivir entre la espada y la pared, el espacio entre los sueños y las frustacciones.

Resumen: Ulises es el relato de un día en la vida de 3 personajes Leopold Bloom, su mujer Molly y el joven Stephen Dedalus. Un viaje de un día, una Odisea inversa, en la que los temás tópicamente homéricos se invierten y subvierten a través de un grupo decididamente antiheroico cuya tragedia raya la comicidad.

Relato paródico de la épica de la condición humana y de Dublín y sus buenas costumbres cuya estructura, desbordantemente vanguardista avisa a cada rato de su dificultad y exige la máxima dedicación. Ulises es un libro altisonante, soez y erudito donde los haya que ofrece una literatura distinta, extraña, ocasinalmente molesta y sin duda excepcional.

Retrato del artista adolescente

Con innegables reminiscencias al retrato de Dorian Gray, de Oscar Wilde, James Joyce trae a su terreno la idea para hacerla mucho más personal.

El retrato recoge en este caso su percepción de lo que fue su juventud, de lo que fue el mismo, de lo que fueron sus ideales y sus motivaciones hasta ese mismo momento en el que se sentó a escribir este libro. Resumen: Novela con una fuerte carga autobiográfica, publicada periódicamente entre 1914 y 1915 y finalmente como libro en 1916.

El protagonista, Stephen Dedalus, alter ego de Joyce, relata episodios de su vida a través de evocaciones azarosas de su pensamiento que le llevan a topar una y otra vez con el catolicismo, el pecado, el sacrificio, la penitencia y lo socialmente adecuado.

Obra de expiación y exorcismo personal de Joyce es también la consolidación definitiva en el desarrollo de un personaje, Stephen Dedalus, fundamental en Ulises.

Retrato del joven artista

Finnegans Wake

Para todo lector que acabe adorando a Joyce una vez leída la novela Ulises, para todo aquel que raye lo fetichista y que busque la rareza, la forma de acercarse espiritualmente al autor, allá va una obra diferente, escrita quizás desde el subconsciente alcanzado en un delirio de alcohol.

La verdad de los borrachos debería ser una deuda a pagar por todo escritor, para acabar por vomitar todo eso que se quedó en el tintero, las intenciones jamás explicitadas…

Resumen: Finnegans Wake, relato de somnolencia, de borrachera, de imaginario onírico y etílico, no es un libro escrito en una lengua. Nominalmente, sí, está escrito en inglés, pero es pura circunstancia.

Detrás del inglés se esconde otra cosa, una alteración poética, deliberada, en ocasiones maliciosa, que trueca al ingles en el caparazón del lenguaje de los sueños. Una relación no reseñable de polisemias, significados ocultos, giros imprevisibles, simbolismos subconscientes y acontecimientos azarosos que, según el propio Joyce, tendría ocupados a los académicos durante más de 100 años.

La obra, técnicamente intraducible, ha sido objeto de algunos intentos de versión al castellano. La edición de Lumen es el último de ellos con la mayor cantidad de texto vertido a la lengua de Cervantes.

Finnegans Wake

Otros libros interesantes de James Joyce

Los muertos

También Joyce extiende su sombra hacia la narrativa breve. Y en esta ocasión nos acerca a una Navidad distinta, con el mismo alcance gélido de la niña de fósforos de Andersen pero más enfocado hacia esa transformación de la alegría en la imposible celebración cuando ya no están aquellos con los que más gusta brindar…

La velada navideña en casa de las señoritas Morkan es el acontecimiento anual por excelencia. El hogar se llena de risas, música y baile para gran disfrute de los invitados y sus anfitrionas. Pero también del quedo silencio de los que ya no están. La memoria de los que nos dejaron llevará a los personajes a recorrer caminos largo tiempo olvidados.

El lector, de la mano de Gabriel Conroy, perdido en el reflejo de la noche blanca dublinesa, asistirá a una epifanía, ya inmortal en los anales de la literatura, que anticipa las técnicas renovadoras que empleó Joyce en Retrato del artista adolescente y Ulises.

Los muertos, Joyce
5/5 - (7 votos)

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.