El thriller doméstico está de moda. Autores como Shari Lapena o Mattias Edvardsson dan buena cuenta de ello. Pero que esté de moda no quiere decir que sea algo vanguardista. De hecho, en realidad lo del suspense de puertas hacia adentro es un argumento concurrido por muchos otros autores. Porque las fobias y filias que cada cual resguarda en su hogar para entregarse a ellas nada más quitarse el abrigo, los zapatos y el sombrero.
Mattias Edvarsson llega a la literatura para levantar las alfombras, ventilar los trapos sucios y despertar la desasogante sensación de que el enemigo puede estar dentro de casa. Eso en el mejor de los casos. Porque dada la confianza habitual de los lazos de consanguinidad, el descubrimiento puede manifestarse demasiado tarde. De las familias mejores avenidas a los hogares hechos caja de tormentas puede que solo haya un golpe de mala suerte, una doble vida o hasta un giro de lo más insospechado que transforma el refugio doméstico en un inesperado campo de batalla de lo más cruento.
Top novelas recomendadas de Mattias Edvarsson
Una familia normal
La normalidad. La uniforme sensación de ajustarse a los patrones morales y las estridencias que cada cual descubren en el chirriante mecanismo interior. Hay quien incluso se sorprende de haber compartido mesa de nochebuena con un cuñado que acaba por descubrirse un asesino en serie. O peor, ocurre en ocasiones que el hermano con el que compartiste juegos está realmente metido hasta las cejas en una trama de corrupción de tomo y lomo sin contar contigo para blanquear a base de bien los billetes de 500. Nadie está exento de sorpresa en el ámbito familiar y entre chiste y anécdota de sobre mesa, cada cual guarda para sí ese secretillo que acabaría por romperlo todo en mil pedazos…
Adam y Ulrika, un matrimonio normal, viven con su hija Stella, de dieciocho años, en una zona agradable en las afueras de Lund. En apariencia, su vida es perfecta… hasta que un día dicha ilusión se trunca de raíz cuando Stella es arrestada por haber asesinado brutalmente a un hombre casi quince años mayor que ella. Su padre, un respetado pastor de la iglesia sueca, y su madre, una conocida abogada defensora criminal, deberán replantearse su paradigma ético mientras la defienden e intentan comprender por qué es la principal sospechosa del crimen. ¿Hasta dónde llegarán para proteger a su hija? ¿Saben realmente cómo es? Y más preocupante aún: ¿acaso se conocen el uno al otro?
Una historia casi verdadera
La idea, la sinopsis, las primeras páginas…, todo evoca a Joël Dicker y su caso Harry Quebert. Justo es reconocerlo así. Pero enseguida la historia coge otro ritmo bien distinto y un planteamiento que si bien bebe en parte del recurso flasback como truco y efecto con el que ir enganchando sin remisión al lector, aporta incluso una sofisticación mayor para completo deleite del lector.
Lo de buscar una buena historia que contar es el anhelo de todo escritor o aspirante al oficio. Zack Levines es uno más de los que pretende contar la historia jamás contada, el bestseller del millón… Solo que él sabe que lo tiene, dispone del argumento perfecto, salvo por algunos contratiempos.
Todo está en el pasado, en su tiempo de juventud. Ya por entonces, en el año 1996, Zack barruntaba al escritor que se removía inquieto en su interior. Junto con otros compañeros acude a un curso de Creación Literaria. Probablemente, la motivación de esos tres amigos de entonces no fuera la misma. De hecho, la imponente presencia de la profesora Li Karpe les despertaba más líbido que inquietudes metalingüísticas.
Volvemos a 2008, el punto de partida…, Zack ya tiene el título de la novela, el cursor parpadea tras la palabra e del título El asesino inocente, pero ¿puede contarlo? y lo que es peor debe seguir los hechos a pies juntillas o valdría con escamotear ciertos aspectos. Incluso le asalta otra duda peor, después de doce años, ¿se le escapa algo?
Los 90 fueron esos años gloriosos de juerga y formación académica, el equilibrio que tantos jóvenes pretenden conseguir… Zack estudió en la prestigiosa universidad de Lund, en Suecia. Y aunque guarda buenos recuerdos de ella, sabe que no siempre fue todo diversión.
Es más, sus lagunas creativas, aquellas que le imposibilitan cerrar la trama de su novela se asoman a los peores días en aquella universidad… Pero ahora necesitar saber qué son aquellas sombras, esas dudas sobre lo que realmente pasó. Contactar con los amigos es su única salida al atolladero creativo que empieza a arañar también en la parcela más vital de Zack.
Todo ronda en torno a Leo Stark, aquel escritor que les presentara la fascinante Li Karpe. Él fue quien terminó por conducirlos hacia la difusa frontera entre ficción y realidad. Juntarse ahora los cuatro se asemeja a una sesión de espiritismo, o incluso una exorcización. La verdad los espera, con sus gélidos brazos abiertos.
