Año uno, de Nora Roberts
Corría 2019, el último año de la vieja era. Nora Roberts acababa de reorientarse hacia la narrativa más distópica desde los romances a los que nos tenía habituados. Claro está que no podía ni remotamente imaginar el escenario real con tintes preapocalípticos que, gracias a la pandemia actual, sobrevuela con mayores tintes de verosimilitud que cualquier novela o película. Tan solo fue cuestión de meses para que la Roberts se convirtiera en la más aciaga pitonisa del devenir de nuestro …