Una vez que la buena de Elly Griffiths ha llegado al mercado editorial español nos podemos preparar para una tormenta perfecta que ensombrecerá nuestras lecturas con series negras o de intensos misterios. Y es que Domenica, como así se llama esta autora parece la vertiente femenina de un John Banville en su desdoblamiento como Benjamin Black.
Será cosa de esa productividad y creatividad envidiables, confabuladas ambas virtudes para escarnio de otros escritores que se enfrentan al folio en blanco con frustrantes resultados… Otra cosa es ya lo del éxito más o menos rotundo. Solo que sabiendo hacer y con empeño todo acaba llegando.
Y como digo en el caso de Griffiths el asalto internacional generalizado llegó cuando ya rondaba una veintena de novelas con sus rigurosos éxitos de puertas hacia adentro de la Gran Bretaña. La cuestión es disfrutar ahora de sus personajes de exquisita e inquietante factura, como habitantes de las sombras donde conviven los protagonistas de lo criminal, de lo enigmático y hasta de lo esotérico si toca. El lugar perfecto para que autoras como Griffiths encuentren su inspiración.
Top 3 novelas recomendadas de Elly Griffiths
Una tumba entre las rocas
La tercera entrega de la inconfudible serie de Ruth Galloway. Conocemos a investigadores de toda condición y pelaje. Pero lo de Ruth Galloway tiene un encanto diferente. Cada nueva entrega evidencia que Griffiths maneja otros registros. Sus tramas se mueven hacia un desvelado de las tramas siempre más original.
El mar lo devuelve todo, ¿incluso la verdad? Algunos secretos enterrados nunca deberían salir a la luz. Un nuevo caso para la arqueóloga forense Ruth Galloway.
Un equipo de geólogos que investiga la erosión costera en la bahía norte de Norfolk se pone en contacto con la doctora Ruth Galloway al hallar seis cuerpos enterrados al pie de un acantilado. La arqueóloga y el inspector Harry Nelson se unen una vez más para desentrañar el pasado, aunque la situación es de lo más incómoda, pues Nelson debe evitar a toda costa que su esposa Michelle sospeche de la relación que hay entre ellos dos.
Las pruebas revelan que los cadáveres corresponden a seis hombres jóvenes que fueron asesinados hace más de setenta años. El misterio de sus muertes parece remontarse a la Segunda Guerra Mundial, una época en la que Gran Bretaña vivía con inquietud una posible invasión de los alemanes.
Los ecos del pantano
Como ya anticipaaba antes, la llegada de esta primera novela de una apabullante saga como es la serie en torno a la protagonista Ruth Galloway es una gran noticia si acaba por fructificar en su natural concatenación con las más de 14 entregas que lleva ya. Porque Elly Griffiths es una escritora particular llegada al género negro con una pluma impresionista que sabe mover la trama desde un singular aspecto descriptivo, hacia la ambientación como parte del suspense, de la tensión.
Ayuda mucho en esta especie de inmersión entre trama y escenario el rol elegido para Ruth Galloway, una arqueóloga que inicia sus servicios para la policía con aparente ocasionalidad. Su desempeño, su concienzudo trabajo y su capacidad para hilvanar el presente con los vestigios del ayer más remoto sirven a esa causa transformadora por medio de los grandes paisajes abiertos, entre atávicas brumas de las islas… Nada mejor que un lugar como Nortfolk, uno de los condados más al este de las islas británicas para iniciar este viaje entre lo policíaco, lo telúrico, y lo arqueológico.
Ruth es una mujer solitaria, con la compañía de sus gatos y las ocasiones visitas de alguna amistad con la que compartir algún buen rato con esas vistas a la eternidad. Pero la paz de Ruth se rompe cuando aparece en su vida Harry Nelson, inspector de policía que, conociendo de su desempeño, se acerca a ella para solicitar su ayuda respecto a unos viejos huesos encontrados. Ante el total desconocimiento de Harry, Ruth le hace entender que esos restos óseos no son de Lucy Downey, la niña desaparecida hace años, si no que pertenecen a un tiempo mucho más anterior.
Y sin embargo la colaboración no acaba allí. Porque en el trabajo de campo en torno a los huesos, Ruth acaba descubriendo referencias a sacrificios humanos que despiertan la intriga de Harry y que sí pueden entroncar con un presente oscuro.
Cuando una segunda niña desaparece, parece como si todo casara. El coincidente hallazo de Ruth, la investigación sobre el significado de los mensajes encontrados paralelamente a los huesos… Y ahí es donde empezados a hilvanar esas sospechas que ineludiblemente se acercan al entorno más próximo de Ruth, sus colegas y otros estudiosos como ella…
El umbral de la mentira
Las cosas, lo inmaterial…., en ocasiones parecen querer decirnos algo. Las piedras erigidas para levantar un castillo, una simple piedra en el monte que ha podido ver pasar estación tras estación hasta cumplir milenios. Y los huesos, parte de lo que fuimos queda en una inescrutable memoria de calcio apelmazada. Salvo para alguien como Ruth Galloway, esperta en hacer hablar a los huesos…
Cuando los obreros que están llevando a cabo las tareas de demolición de una vieja casa en Norwich descubren el esqueleto incompleto de un niño, la arqueóloga forense Ruth Galloway intenta esclarecer su procedencia. ¿Se trata de un sacrificio ritual llevado a cabo por nuestros ancestros o de la víctima de un asesinato? Ruth intentará averiguarlo junto al detective Harry Nelson.
La casa fue un orfanato en la década de 1970, y el sacerdote que lo dirigía aporta nuevas pistas al recordar la desaparición de dos hermanos, un niño y una niña, a los que nunca encontraron. La curiosidad de Ruth aumenta y ni siquiera las molestias de su embarazo impedirán que se implique en el caso. Sin embargo, pronto se dará cuenta de que alguien está dispuesto a darle un susto de muerte.