Recurriendo a la fácil comparación, Ben Kane es algo así como el Santiago Posteguillo de Kenia. Ambos escritores son apasionados confesos del mundo antiguo, manifestando esa devoción en su profusión narrativa sobre esta temática. En ambos casos también hay una especial predilección por esa Roma imperial en torno a la cual se instauraron las bases más firmes de Occidente, con permiso de una Antigua Grecia que le antecedió.
Puestos a diferenciar a estos autores a todas luces complementarios, quizás se pueda decir que Ben Kane se centra más en sus sagas en los aspectos más propios de la evolución imperial, de las conquistas y las guerras.
Un componente bélico más marcado que incluso se extiende a ese fascinante mundo de los gladiadores enfrentados a su fatal destino en anfiteatros que se fueron extendiendo por todo el mundo conocido.
Entregarse a la lectura de las obras de Ben Kane supone adentrarse con minuciosidad, pero siempre en una acción trepidante, a esa herramienta fundamental para la gloria de Roma como eran sus ejércitos.
Historias entre legiones, campamentos, estructuras militares y hasta salarios. Personajes universales de aquellos días remotos recuperados para la causa de una profundización histórica siempre loable; escenarios desde cuyas piedras de hoy se pueden evocar trascendentales sucesos que cambiaron la historia.
Top 3 novelas recomendadas de Ben Kane
Águilas en la tormenta
En ocasiones las sagas, trilogías y demás secuelas pueden ir perdiendo fuelle conforme se avanza en la historia. En este caso, final de una serie, la trama siempre va a más en un autor capaz de dosificarse para desplegar finalmente lo mejor del volumen.
La serie de las Águilas de Roma llega a su conclusión con esta tercera entrega. El autor keniano Ben Kane cierra así su última composición de ficción histórica entregada a sus aspectos más bélicos. Tiempos lejanos en los que los territorios se defendían o se conquistaban regueros de sangre mediante.
Recientemente reseñé otra novela interesante de esta temática histórica bélica, centrada además en aspectos tocados ya por Ben Kane en su duología de Espartaco. Se trata de “La Rebelión”, de David Anthony Durham, por si te apetece echar un vistazo…
Pero volviendo a este libro Águilas en la tormenta, toca señalar la obra como un broche perfecto para la última gran saga de Kane. Historia, acción y emociones fuertes. El devenir de un mundo donde morir en el frente resultaba cotidiano para que el imperio de Roma mantuviera su gloria y dominios. El símbolo del águila, estandarte de las legiones de Roma, como representación de la ambición de todo un Imperio. Sinopsis: Año 15 d.C.
El jefe Arminio ha sido derrotado, una de las águilas romanas recuperadas y miles de guerreros de las tribus de Germania masacrados. Sin embargo, para el centurión Lucius Tullus estas victorias no son, ni mucho menos, suficientes. No descansará hasta que el propio Arminio muera, el águila de su legión sea recuperada y las tribus enemigas totalmente exterminadas. Por su parte, Arminio, taimado y valiente, también busca venganza.
Más carismático que nunca, consigue reunir otro gran ejército tribal que acosará a los romanos a lo largo y ancho de sus territorios. Muy pronto, Tullus se encuentra en un hervidero de violencia, traiciones y peligros. Y la misión para recuperar el águila de su legión se revelará como la más peligrosa de todas.
La legión olvidada
Una de esas historias que conjuga magistralmente la épica desde la superación, cuando precisamente todo intento de superación que aspire a una evolución siempre nazca como un ideal con las alas cortadas.
Porque la Roma del año 40 a.C. no es el mejor lugar para que los marcados como esclavos, los prisioneros o las meretrices puedan pensar en lograr una vida mejor que no pase por alguna casual y anatemática reencarnación. Y si embargo ese destino al que se entregaban emperadores y grandes hombres de la gloriosa Roma tenía escrito otro guión en la que algunos personajes secundarios tomaban los mandos.
Por un lado los hermanos Rómulo y Fabiola, condenados por nacer desde el vientre de una esclava; por otro lado Tarquinus y su capacidad para lanzar predicciones; en última instancia el poder de la fuerza en ocasiones necesaria de Brennus. Cuando los cuatro coincidan en ese escenario ofrecido por la Divina providencia, pueden ser capaces de todo.
Aníbal
Enemigo de Roma: Por alternar entre diferentes series, he seleccionado esta novela más ajustada por todos sus contornos con esa historia documentada que no por ello deja de construir mitos. El personaje de Aníbal trascendió hasta nuestros días con esa vitola de genial estratega militar y valeroso soldado en última instancia. Y claro está que Ben Kane no podía pasar por alto a este grande de aquellos días de imperio y guerra.
La leyenda del cartaginés que desafió a Roma adquiere nuevos bríos bajo la pluma de Kane. Desde ese prisma de venganza, potenciada con las referencias a la Primera Guerra Púnica perdida por Cartago, emprendemos el viaje del resarcimiento, de la ofensa a Roma desde la recuperación de nuevos territorios entre el norte de África e Hispania.
Para completar esa trama que ya se bastaba por su misma magnitud, la trama se completa con esa intrahistoria en la que el autor deja volar más su imaginación sin ceñirse a hechos documentados. La aventura entre los jóvenes Hanno y Quinto nos enfrenta a ese crudo relato de la guerra que separa a dos personas criadas como hermanos.
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