Los 3 mejores libros de Jacobo Bergareche

Como en todo oficio, pero sobre todo como en cualquier ámbito creativo, el autor curtido parece aportar esa mayor valía para quienes observan una obra final cargada de mayor relevancia o al menos de mayor bagaje que la de otros advenedizos ubicados ahí por obra y gracía de otros aspectos diferentes a la mera valía.

El caso de Jacobo Bergareche (alter ego en lo físico de Manuel Jabois) es el paradigma del narrador en busca de la historia que contar desde las vivencias, las lecturas y la pujanza inesperada del escritor aletargado o transmutado en otros menesteres creativos. Se empieza escribiendo relatos o poemas y se continúa en eso de poner negro sobre blanco mientras se descubran nuevas cosas que seguir contando en prosa o verso.

Porque también tiene su encanto lo impredecible, las carreras literarias guadianescas que emergen con nueva luz desde los inframundos. Desde otros paisajes poéticos de honduras imposibles acaban llegando nuevas imágenes que salpican una nueva novela a escribir. Así es como se hace literatura trascendente, en la medida en que lo que nos encoje el corazón alcanza o al menos roza ese parnaso del alma con su remanso de paz, amor, felicidad y después nostalgia.

Top novelas recomendadas de Jacobo Bergareche

Los días perfectos

Los que nunca ocurren. Los que trazan un mundo ucrónico solo distante un paso, una decisión, una casualidad. Esos son los días perfectos y se añoran con la melancolía de lo que sí existe en otro plano, donde otro yo disfruta plenamente de la perfección lanzando una sonrisa sarcástica al otro lado, a las sombras de este mundo.

Luis, un periodista cansado de su trabajo y su matrimonio, planea asistir a un congreso en Austin, Texas. El viaje es una mera coartada para encontrarse brevemente con Camila, quien se ha convertido en el único aliciente de su vida. Pero cuando está a punto de partir, recibe un mensaje suyo: «Dejémoslo aquí, quedémonos el recuerdo». Desconsolado y sin saber qué hacer en Austin, se refugia en un archivo de la universidad, donde se topa casualmente con unas cartas de William Faulkner a su amante Meta Carpenter.

La lectura de esta larga correspondencia lo ayuda a reconstruir el recuerdo de su aventura amorosa y a reflexionar sobre su tedioso matrimonio, pero también a preguntarse cómo hay que vivir para lograr que cada día valga la pena.

Con altas dosis de verdad y humor y una enorme fuerza narrativa, Jacobo Bergareche arrastra al lector en esta singular y cautivadora novela que explora de forma universal la fiebre del enamoramiento y la inevitable rutina de las relaciones de largo recorrido. Un libro cuya excepcional solidez y originalidad revelan la madurez literaria del autor.

Los días perfectos

Estaciones de regreso

La verdad nunca es incómoda. Lo que es incómodo es la forma de descubrirla, los ojos trémulos sobre el nuevo desconcierto o el corazón encogido por el hallazgo que atormenta o desestabiliza la moral. Echar la vista atrás, entre el brumoso idealismo de lo que quisiéramos que hubiera pasado y el crudo golpe de lo que pasó…

Jacobo Bergareche arranca este relato autobiográfico con la noticia de la muerte de su hermano menor, asesinado en Angola, y en medio de la devastación que deja este hecho en su vida, comienza un viaje en la memoria, en busca de aquellas experiencias profundas, de huella duradera, como lo son el primer amor, el primer gran viaje o las primeras lecturas, donde el autor trata de rescatar aquellas cosas por las que merecía la pena vivir, aquellas en que alguna vez encontramos una perenne promesas de felicidad.

Este es un libro sobre el duelo y es también el detonante para modificar todo lo que hemos convertido en cotidiano, lo que cambia el foco y la lente con los que vemos el mundo y su recuerdo. Un camino que se abre para transformarnos en algo nuevo. Escrito con las herramientas de la mejor literatura, arriesga y conmueve por su sinceridad, sin ahorrarse ninguna verdad incómoda.

Estaciones de regreso

Las despedidas

Cada nuevo encuentro es una despedida de algo anterior. Sobre todo en esos momentos en los que un paso es un punto de inflexión hacia el giro de 180º. Pero el cierre de los episodios vitales no suponen un olvido automático. De hecho el hilo de la existencia necesariamente debería desplegarse en lugar de trazar nudos donde todo se estrecha para que nada fluya, sobre todo la verdad capaz de cortar todo posible nuevo avanzar sin hilos de culpa.

Diego y Claudia ultiman los preparativos de la fiesta de inauguración de su casa en Menorca. Pocos días antes del evento, mientras pasea con su familia, Diego reconoce en una terraza a una extranjera con la que había coincidido en un festival en Estados Unidos. Esa mujer, cuyo nombre Diego desconoce y a la que lleva veinte años sin ver, le ayudó a superar un suceso traumático. Diego quisiera saludarla pero no se atreve, porque entonces tendría que contarle a Claudia cómo se conocieron. Intrigado, se las ingeniará para verla de nuevo en un encuentro que quizá le cambie la vida.

Tras el éxito internacional de Los días perfectos, Jacobo Bergareche regresa a la novela con una emocionante historia que ahonda en la pasión, en la pérdida y en la fuerza del recuerdo. Un libro en el que despliega todo su talento narrativo y que lo confirma como uno de los escritores más prometedores del panorama literario español.

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