Cumpliendo escrupulosamente, ya desde su apariencia, con estereotipos de escritor entregado a la causa desde todos los flancos, Carlos Augusto Casas es ya ese autor de considerables hechuras narrativas. Porque sus novelas tienen también esa personalidad de lo disruptivo, de la creatividad que traspasa los géneros para ubicarse en un espacio propio.
Quizás alcanzando por momentos el género negro en su vertiente más ácida y crítica del primer noir con estribaciones sociológicas. Sin duda siempre zigzagueando en lo argumental para que sus propios personajes padezcan de una desubicación necesaria desde la que despertar empatía a la parque alienación o extrañamiento. Todo en su justa medida.
La cuestión es que Casas supone un gran descubrimiento lector. Algo así como el que me supuso el genial Víctor del Árbol en el suspense made in Spain, solo que agitándolo todo en un cóctel con muchos otros matices al aroma de una intención y un interés narrativo muy particular.
Top 3 novelas recomendadas de Carlos Augusto Casas
El ministerio de la verdad
Toda distopía futurista con intención sociopolítica precisa de su reverencia al 1984 de George Orwell. A eso inspira ya el propio título de esta novela. Pero en este caso es simplemente ese gesto, evidenciado en parte del argumento, para arrancarse después con rabiosa originalidad hacia una historia que podría ser dentro de unos años o tan solo mañana, quizás ya hoy si me apuras…
En una sociedad vacía y marcada por las diferencias de clase, casi todos aceptan sin oposición la pérdida de libertades y las prohibiciones. Nadie se hace preguntas. Tras la Gran Pandemia, ya son muy pocos quienes se atreven a recordar que un mundo mejor fue posible.
Julia Romero es una joven periodista que se niega a aceptar la versión oficial de que su padre, un reportero que abandonó repentinamente el oficio años atrás, se ha suicidado. Cuando Julia descubre que todo rastro de los artículos de su padre ha desaparecido, su investigación la conducirá hacia el todopoderoso Ministerio de la Verdad, el organismo responsable de controlar y manipular la información que llega a los ciudadanos. ¿Qué había descubierto su padre? ¿Quién le ha asesinado?
Mientras, una red clandestina de resistencia vigila a Julia desde la distancia. Son ellos quienes a menudo dejan viejos ejemplares de 1984, la gran novela de George Orwell, en los buzones de quienes están en peligro. Es la señal de que los sicarios del Ministerio están ya muy cerca.
Ya no quedan junglas adonde regresar
Ni islas donde naufragar, como diría Joaquín Sabina, ni junglas adonde regresar. Por momentos la sensación de que todo está arrasado nos adentra en una sensación de limitación para la imaginación o el ánimo de aventura, con sus riesgos inherentes.
Es eso o divisar la existencia desde otro prisma. Reinventarse no al uso de las recomendaciones de los coach y gurús de la inteligencia emocional sino de nuevos aventureros negados a lo cotidiano y enfrentados aún a las injusticias. El país de nunca jamás o los reinos de fantasía llegados a la edad adulta. Los paraísos perdidos, las islas donde naufragar y las junglas donde aún perderse para enfrentarse a inimaginables bestias de lo inmoral.
Una historia de amor y la venganza. Una trama trepidante, con sorprendentes giros argumentales, que rompen los esquemas establecidos dentro del género negro. Un viejo apodado «El Gentleman» espera semana tras semana la llegada del jueves. Es el día en el que verá a Olga, una joven prostituta que despliega sus encantos de saldo en la calle Montera.
Pero al viejo no le interesa el sexo. Durante el tiempo que pasan juntos, ambos abandonan las pequeñas mezquindades de sus respectivas vidas para convertirse en otra mujer y otro hombre. Irreales y hermosos, como los sueños. Un día Olga es brutalmente asesinada.
Cuatro abogados son los sospechosos de haber cometido el crimen y el viejo decide que ya está harto de que la vida le arrebate todo lo que ama. Ya no le queda nada, sólo la venganza. Comienza a hacer planes para matarlos uno por uno. El hombre más peligroso es aquel que no tiene nada que perder porque ya lo ha perdido todo.
La ley del padre
Existe un mundo que solo pertenece a una élite. Una realidad que los demás creemos anhelar, pero que apenas un puñado de escogidos conocen. Es el mundo de las grandes fortunas y el poder. Un universo donde todos tenemos un precio, siempre que haya alguien dispuesto a pagarlo. Esta es la historia de una familia con mucho dinero y muy pocos escrúpulos.
Los Gómez-Arjona son dueños de un enorme imperio mediático y su patriarca, Arturo, parece tenerlo todo bajo control hasta que, en la celebración de su cumpleaños, alguien intenta envenenarlo. ¿Cuál de sus cuatro hijos -todos corruptos y ambiciosos, aunque cada uno de un modo distinto- quiere arrebatarle el poder? Todos los padres tienen su propia ley y, aunque suponga derribar a uno de los suyos, Arturo no dudará en llegar hasta el fi nal para aplicar la suya.
Así arranca este thriller lleno de traición, misterio y despecho fi rmado por uno de los autores más prestigiosos y premiados del género. Como si miráramos a través del ojo de la cerradura, Carlos Augusto Casas nos adentra en las altas esferas de la capital y nos acompaña a lo largo de una trama vertiginosa en la que pronto descubriremos que ni siquiera el poder y el dinero pueden silenciar un secreto para siempre.