Son tantos ya los casos de enorme éxito generalizado tras la autoedición… Dolores Redondo, Javier Castillo, Eva García Sáez… El paradigma editorial ha cambiado y lo de llamar a puerta fría a las editoriales más prestigiosas ya no tiene sentido.
Si confías en tu obra, si lectores de tu entorno más sincero también confían, sin finalmente lectores de la plataforma de turno donde te autoeditas también confían… No lo dejes, date vida con el marketing, plantéate tus campañas y tendrás muchas más opciones que enviando manuscritos a Planeta, Anagrama, Alfaguara o la que sea…
Un nuevo caso de esta fórmula hacia el reconocimiento general desde el gusto democrático de crecientes lectores es el de Haizea López. Una joven autora que empezó con el género romántico y con su pseudónimo «Búho» (quizás le sirva para diferenciar vertientes creativas en distintos géneros), pero que finalmente está rompiendo hacia un suspense entre brumas del alma llegadas desde costas cantábricas o bosques frondosos. Por buscar referentes en eso del misterio hacia el suspense, quizás Víctor del Árbol podrías ser inspiración, quizás consciente, quizás casual…
Top 3 novelas recomendadas de Haizea López
Hija de la lluvia
Lo familiar y lo atávico, las costumbres que rigen de puertas hacia adentro como algo ritual de donde ninguna anomalía puede participar, ningún secreto, ninguna desviación. Hasta desechar la verdad de la memoria, incluso cuando el mal ha podido penetrar en el círculo más estrecho y asfixiante de lo familiar.
La maldición persigue a la familia Agirregoitia y llega a calarles tanto y tan profundo como la lluvia en los campos de viñedos alaveses. Hace doce años, Ainize dejó Artziniega y perdió todo contacto con los suyos: con su padre, Ramón Agirregoitia, pequeño viticultor del valle, encerrado en sí mismo desde que su mujer los abandonara; con Gorka, su hermano mellizo, uña y carne durante la infancia, y con Elsa, la mujer que cuidó de la casa y de todos ellos como si de su propia familia se tratara.
Ainize se fue huyendo de la locura que palpita entre las paredes de Haize Hegoa, el caserón familiar, desde hace generaciones, y ahora vive en París con Pierre, propietario de una galería de arte. No le pesa haber dejado el valle donde siempre llueve. Ni siquiera le pesa haber roto con Haritz, su amigo de la infancia, su amor de adolescencia, el chico capaz de sacarla de su mundo, por quien lo habría dado todo… menos su vida.
A punto de inaugurar su primera exposición, Ainize recibe una llamada de Elsa: ha de regresar con urgencia a Artziniega porque su padre ha muerto; la maldición lo atrapó al fin y hay decisiones que tomar sobre la herencia. De nuevo en el caserón destartalado, en el viñedo descuidado, Ainize ha de volver a enfrentarse a sus miedos y jugar una extraña partida de ajedrez contra un contrincante invisible que solo parece existir en su mente y contra un amor que aún permanece en su corazón.
La cueva de Mari
El bosque como representación máxima de remotos miedos que despiertan leyendas y mitos. Porque el ser humano perteneció al bosque hasta que escapó a sus aledaños valles. Era escapar de las sombras y abrirse a la luz, a los espacios por donde transcurrían los ríos nacidos, también, de entre los bosques… Atrás quedaban las cuevas habitadas con recelo. Salvo para quienes aún las ocupan para ominosos fines…
A Iker Ibarguren parece perseguirle la mala suerte y… “el asesino de la flor”; el autor del único expediente que ha dejado abierto y sin resolver en toda su carrera profesional. Y el mismo por el que se ha quedado fuera del cuerpo durante los próximos seis meses de su vida.
Cuando Iker se trasladó a Getxo no esperaba que los crímenes reaparecieran de nuevo, y menos aún que se cometieran en el mismo municipio al que él se había mudado. La pesadilla parece continuar y esta vez se sentirá acorralado y sin escapatoria. ¿Será capaz de vencer en el último pulso?
El canto de Lamia
Una segunda parte de «Los crímenes de Getxo» que ya afianzó a la autora en un género de suspense hacia el thriller y el noir. Asesinatos, investigaciones y un nudo que apunta a ese giro final sorprendente, solo a la altura de los escritores dotados para este tipo de propuestas.
Iker Ibarguren y Etxaniz vuelven para investigar el asesinato de Aitor Zabala, un chico que ha aparecido asesinado en la cala del Puerto Viejo de Getxo con una amenazada en el bolsillo del pantalón: “O pagas, o mueres. Zezengorri”. Los suboficiales no tardan en darse cuenta de que su hermana melliza está desaparecida y cada minuto de la investigación cuenta si pretenden encontrarla con vida.
¿Dónde está Lamia Zabala? ¿Quién se la ha llevado? ¿Quién ha matado a Aitor? Y lo más, inquietante de todo: ¿quién es Zezengorri? Una muerte rodeada de misterios que arrastrará a los investigadores hacia un pozo sin fondo en esa investigación sin salidas entre los escenarios más escalofriantes de Getxo.