Lo de la doble vida es un argumento recurrente, tal como sucede en la vida misma, en no pocas ocasiones, cuando se manifiestan aspectos truculentos de quien menos esperamos.
En lo literario encontramos ilustres ejemplos hiperbólicos con el doctor Jekyll o Dorian Gray, personajes que acaban conviviendo a uno u otro lado de sus apariencias y los oscuros dictados de su alma. Y la cosa es que historias así siempre triunfan, quizás porque conectan con una lado oscuro no tan ajeno para todo hijo de vecino…
Y si la cosa va más allá del propio vecino y alguien como J.P. Delaney es capaz de convencernos de que lo desconocido puede habitar puertas adentro de nuestro propio hogar, ya ni te cuento…
Vivimos tiempos extraños merced a nuestra capacidad para alcanzar hasta metafísicos de nuestra esencia humana. Nos movemos entre preapocalipsis víricas de fundadas sospechas artificiales hasta anuncios biogenéticos que auguran descendencias de diseño para que nadie tenga que cargar con un vástago de ciertas tendencias o deficiencias… Y así una historia como esta cobra esa dimensión de un suspense inquietante sobre nuestro propio devenir como sociedad.
Porque como se verá, Tim Scott todo lo puede, o eso cree. E incluso cuando la vida la asesta uno de esos azarososo golpes devastadores, él cree que puede trastocarlo todo. Abbie aparecen entonces como amada esposa recuperada artificialmente. Porque su extraña desaparición llegó a dar en punto muerto para todos sin visos de solución. Solo que la consciencia no es tan fácilmente manipulable como la genética. Y es que Abbie tiene sus dudas en torno a todo lo que se le cuenta…
Hace cinco años, Abbie Cullen desapareció en extrañas circunstancias. Fue un golpe tan terrible para su marido, Tim Scott, empresario de éxito fundador de una de las start-ups más innovadoras de Silicon Valley, que decidió dedicarse en cuerpo y alma a recuperar a su esposa. Y lo consiguió.
Abbie se despierta en las oficinas de Tim aturdida y confusa, no sabe quién es ni recuerda cómo ha llegado hasta allí. Él le cuenta que es una artista de gran talento, una deportista que adora practicar el surf y una madre cariñosa para Danny. Le dice que cinco años atrás sufrió un terrible accidente y que gracias a un impresionante avance tecnológico ha podido recuperarla.
A medida que Abbie reconstruye los recuerdos de su matrimonio comienza a cuestionar a su marido y su versión de lo ocurrido. ¿Qué pasó realmente? ¿Puede confiar en su esposo cuando dice que quiere que estén juntos para siempre?
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